14 de mayo de 2020

TRAYECTORIAS VIAJERAS-TRAS LAS HUELLAS DE... UN ERRANTE POR EL MUNDO



En 1.951, un joven errante de 17 años, inicia el periplo de su vida de escritor viajero. 
Sale de su país Holanda, hacia Bélgica y Luxemburgo en bicicleta, y de ahí al resto de Europa.

Tomado de www.aytopalencia.es
Sus trayectorias viajeras fueron por Amsterdam, Islas Aran, Australia, Bahía, Berlín, Bangkok, Birmania, Borneo, Bolivia, Bogotá, Medellín, Monpox, Sao Paulo, Rio de Janeiro, Shangai, Reino Unido, Estonia, Francia, Hamburgo, Menorca, Lisboa, España, Isfahan, Japón, Macao, Malasia, Casablanca, México, Estados Unidos, Surinam, Mauritania, Tonga, Sofía, Austria, Tunez, Venecia, Suiza, Nepal, Tailandia, Trinidad, Bruselas, Budapest, Isla Spitsbergen, Atenas.

Desde la planeación de itinerarios de viajes, en la realización de estos periplos se evidencia un apasionado del movimiento, un apasionado por conocer y reflexionar sobre eso que conoce y siempre atento a sus próximos pasos.

Vivió en un mundo de fantasías durante su infancia y adolescencia, y por su entorno familiar y social complejo (separación de sus padres, la guerra mundial y la muerte de su padre después de un bombardeo) decidió salir y caminar por el mundo.

De su andar por Bélgica, Luxemburgo y parte de Europa, años después escribe su primera novela titulada Philip y los otros. No es un libro de viajes, pero si se soportó en su viaje iniciático.

A partir de ahí su vida como escritor fue en paralelo con sus continuos viajes, los cuales se constituyeron en las experiencias convertidas en libros de poesía, novelas, ensayos y libros de viajes.

Fue en un barco carguero viajando hacia Surinam, donde conoció un mundo diferente al que había dejado, y sus fantasías que combinadas con sus experiencias,  le permitieron fortalecer su camino como escritor.
De este viaje y otros, escribió el libro El azar y el destino. Viajes por Latinoamerica. 

En sus viajes iniciales entendió el viaje como "una fundamental experiencia de aprendizaje, ya que viajar es una permanente transacción con los demás, porque al mismo tiempo, uno está solo". Si, es CEES NOOTEBOOM, escritor holandés, que el pasado 29 de abril se le concedió el premio Fomentor de las letras.

CEES NOOTEBOOM
Tomado de www.cronicaglobal.elespanol.com

Después de aproximadamente 60 años de viajes continuos, el escritor con tantas vivencias acumuladas, entiende el viaje como una experiencia de transformación.

Es que en sus periplos, utilizando bicicleta, cargueros, trenes, chalupa, autobuses y aviones, visita variados destinos donde algunas veces, haciendo desvíos a sus trayectorias, conoce museos, cementerios para conocer las tumbas de famosos poetas, catedrales, idiosincrasias de la gente de los lugares, sus comidas, templos y naturaleza.

Cada viaje y la sucesión de ellos provocan la compra de libros locales, reunir mucha documentación de cada sitio, así como anotaciones, que luego de regreso a casa en España u Holanda, son convertidos en libros. Esto caracteriza sus viajes, así como la libertad de disfrutarlos paso a paso, sin afanes.

Viajar en esos periplos le da la sensación de "no pertenecer a nada, a la recopilación de lo otro. Me dilato con aquello que absorbo, veo, recopilo".

Y fue tanto lo que absorbió, vio y recopiló que dio al mundo literatura de gran valor, independiente de no haber terminado los estudios básicos y no haber asistido a la universidad.


Son muchos sus libros, y he aquí algunos de ellos:



https://www.casadellibro.com/libro-hotel-nomada/9788498414509/1726500/22818
https://libro-el-desvio-a-santiago/9788498413786/1619871/22818 https://libro-philip-y-los-otros/9788498414158/1704007/22818



           


Cees Nooteboom:
"Quien viaja no sólo descubre un entorno nuevo, sino que aprende a conocerse de nuevo a si mismo".

"A lo mejor es cierto que el verdadero viaje se halla continuamente en el ojo del huracán. El huracán es el mundo, el ojo, aquello con que el viajero contempla el mundo. La meteorología nos enseña que en el interior de ese ojo reina la calma, tal vez las misma calma que en la celda de un monje. Quien aprenda a mirar por este ojo, quizás aprenda también a distinguir lo esencial de lo fútil o, cuando menos, a ver en que se diferencian y en que son iguales las personas y las cosas".

"Visto desde esta perspectiva, cabría decir que quien huye de la realidad es aquel que se queda en casa sometido a la rutina de la vida diaria, porque no puede soportar la amarga sabiduría que proporciona el viaje".


Gracias a este errante por el mundo podemos disfrutar de estas y otras buenas lecturas para todos los tiempos.

No olviden visitar su web: www.ceesnooteboom.com 


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