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| Tomado de www.sinohasviajado.com |
-Madrugaste mucho a nuestro encuentro.
- Si. Estaba en la librería revisando unos libros.
- Compraste alguno?.
- Si, dos de Santiago Gamboa, pero después de mucho buscar e insistirle al librero.
- Por qué? No quería vender?.
- No, todo lo contrario. Es que es difícil que algunas librerías tengan claridad de que es un libro de viajes, entonces casi que hay que buscarlo con lupa con ellos.
En ese momento llegó Santiago para reunirse con Eliana y Mauricio. Se saludaron y pidieron las bebidas al joven que les había ofrecido la carta de cafés.
- En qué estaban? Actualícenme.
- Eliana me estaba contando que para conseguir ciertos libros ha tenido que estar muy informado porque algunos libreros no son expertos en todos los géneros, y bueno, Eliana tiene sus preferencias.
- Ah si. Las guías de viaje o algo así.
- No, no. Parece que son dos cosas diferentes.
- Exacto, pero no hablemos de eso. Si han pensado en el viaje?
- Espera. Por qué no nos aclaras antes lo de los libros y luego miramos nuestro viaje. Por ahí leí que Agatha Christie también escribió un libro contando sobre sus viajes, pero no entendí si fue una autobiografía, ensayo o qué.
- Si Eliana, estoy de acuerdo con Mauricio. Cuéntanos porque yo a veces tengo que ir con el nombre del autor o del libro después de buscar en internet si el contenido es lo que me interesa. Porque los libreros a veces no escuchan que es lo que uno quisiera leer y no sugieren, solo están atentos a mostrar el libro que uno menciona.
- Si es complejo porque conocer la gran cantidad de libros, géneros y escritores, uy! es casi imposible.
Lo de Agatha Christie es el libro " El Grand Tour: La vuelta al mundo con la reina del misterio", donde ella a través de fotos, cartas y narraciones cuenta sus experiencias en un viaje de diez meses, cuando acompañaba a su primer esposo en una misión diplomática.
En síntesis, narra uno de sus tantos viajes. Por supuesto ese libro solo se consigue por internet.
A tu inquietud, Mauricio, casi todos los libros o crónicas de viajes, hacen parte de la vida del escritor que viaja y escribe sobre la experiencia de sus viajes, por tanto, tiene un componente autobiográfico, sin proponerse escribir sobre su vida, sino de mostrar su visión sobre dichos viajes. Y no son novelas porque no existe una estructura con trama y personajes.
- Entonces los libros de viajes no son novelas...
- ... Ni guías de viajes.
- En definitiva, son una manera especial de percibir y vivir los viajes, un texto que cuenta a través de descripciones y narración de hechos.
- A propósito de nuestro viaje a Vietnam, es posible que fuéramos capaces de escribirlo? Pero creo que es solo para escritores y que además se dedican a viajar y escribir.
- Sergio tiene razón, además eso es muy difícil porque uno viaja y disfruta y ya.
- Claro, no es fácil, pero lo que he leído acerca de la manera como los escritores viajeros asumen narrar sus viajes, ellos tienen sus métodos. Por ejemplo, identifican claramente porque quieren realizar el viaje al destino señalado; al revisar el mapa plantean su itinerario y aspectos logísticos básicos; muchos de ellos realizan investigaciones previas acerca de la cultura, la historia, la geografía y la situación política del destino. Y bien importante, durante el viaje realizan permanentes anotaciones con sus reflexiones sobre el lugar, la gente y en si la experiencia como tal. Finalmente, son sus anotaciones o diarios de viaje la materia prima para escribir sus viajes. Creo que es la forma fundamental de apropiarse del viaje.
- Estamos lejos de eso, pero investigar previamente y contarnos entre nosotros durante el viaje nuestras apreciaciones, podría ser una forma de apropiarnos de nuestro viaje.
-Me parece una idea genial.
-Estoy de acuerdo. Planeemos cómo haremos la investigación previa y toda la logística del viaje.
Tras pagar lo que consumieron, se despidieron con tareas para preparar su segundo viaje juntos.
En medio de tantos libros, de tantos autores y de la variedad de géneros literarios, el librero tiene un trabajo de gran complejidad que solo puede llevarse a cabo con dedicación y estudio, para que los libros lleguen a los lectores según sus necesidades de conocimiento y no dependiendo de lo que el profesional conoce y ofrece de manera limitada.
En estas circunstancias, la literatura viajera tiene mucho que perder, porque en una gran mayoría los libreros se dedican a vender no solo los best sellers, sino lo común de los géneros, y el género viajero no es tan corriente como lo fue en su época dorada.
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